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Cáncer de Cérvico Uterino
El cáncer del cuello del útero es el segundo cáncer más como una mujer mexicana. Es un cáncer que a pesar de ser fácilmente prevenible y detectarse a través del estudio de citología, continúa siendo un importante problema de salud pública.
¿Cuál es la causa del Cáncer de Cérvico Uterino ?
El cáncer cérvico uterino es causado en más del 90% de los casos por la infección de un virus del papiloma humano. este virus se transmite por vía sexual y todas las personas estarán en contacto con él en algún punto de su vida. Afortunadamente en la mayoría de las ocasiones el cuerpo es capaz de eliminar el virus y generar inmunidad. En un número pequeño de pacientes este virus no logra ser eliminado y genera cambios localizados en la superficie del cérvix que eventualmente desencadenan la formación de lesiones premalignas y ultimadamente cáncer.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Toda mujer con vida sexual activa esta en riesgo de contraer el virus del papiloma humano. Sin embargo, factores que pueden aumentar la exposición o disminuir las defensas contra este virus: múltiples parejas sexuales, el tabaquismo, y la infección por el VIH.
¿Cuáles son los síntomas?
Cuando el virus no ha logrado desencadenar un cáncer y su afección en el cuello del útero se encuentra en etapas tempranas puede no haber ningún síntoma, y así permanecer por años. Cuando el virus ha logrado formar un tumor, se pueden presentar síntomas como sangrado transvaginal anormal, dolor o sangrado posterior a las relaciones sexuales. Y cuando el cáncer está avanzado se pueden presentar otros síntomas como la falla renal o hinchazón de los miembros pélvicos.
¿Cómo se diagnostica?
La infección por virus del papiloma humano y sus complicaciones se pueden diagnosticar a través de dos estudios denominados citología cervical y la detección del material genético del virus. Estos son estudios que se recomiendan realizarse en todas las mujeres con vida sexual activa de forma intermitente. Cuando se detecta alguna alteración dentro de estas pruebas se suele requerir de un estudio avanzado denominado colposcopía para evaluar por medio de un microscopio la superficie externa del cérvix.
¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento del cáncer cérvico uterino inicia desde la prevención. Todas aquellas lesiones se pueden tratar destruyéndolas con tratamientos a base de electricidad o láser. cuando el virus del papiloma humano ha logrado traspasar la capa más superficial. se pueden realizar procedimientos denominados conos que retiran el área afectada del cuello del útero y un segmento de tejido sano alrededor.
En otros casos cuando el cáncer sigue siendo temprano, se pueden realizar procedimientos en los que se retira el útero denominado histerectomía junto con los ganglios localizados en la pelvis. Y en aquellas pacientes en los que el cáncer ha logrado invadir más allá del cuello del útero hacia la vagina o hacia la pelvis el tratamiento es a base de una combinación de quimioterapia con radioterapia.
¿Cómo puede prevenirse?
Gracias a los avances de la ciencia, actualmente existe una vacuna para proteger contra los tipos más frecuentes de virus del papiloma humano asociados al cáncer de cérvix. Esta vacuna que inicialmente se aplicaba a las niñas de entre 10 y 12 años actualmente se recomienda su aplicación en todas las mujeres de menos de 30 años. La vacuna se administra en 3 dosis a los 0, 2 y 6 meses.
Se recomienda la realización anual de una revisión ginecológica, en todas las mujeres por arriba de los 21 años que tengan vida sexual activa. En las mujeres jóvenes se suele realizar la prueba de papanicolaou junto con la detección de material genético del virus. Y en mujeres mayores se realiza únicamente la citología, cuando la mujer ha presentado varios años resultados negativos y ha cumplido los 65 años se puede suspender estos estudios anuales.
Todo resultado anormal debe de ser evaluado por un médico especializado en el tratamiento de las lesiones asociadas al VPH.